miércoles, 27 de septiembre de 2017

La Prioridad de la Predicación Doctrinal

Y se admiraban de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas. (Marcos 1:22)

"¡Oh señores, de qué manera tan clara, tan cerca, tan entregada debemos de dar un mensaje como el momento nuestro, en donde la vida eterna o la muerte eterna de nuestros compatriotas está involucrada! No hay nada más indigno de tal negocio, que ser apático y aburrido. ¡¿Qué?! ¿Hablar fríamente por Dios y por la salvación del hombre? ¿Podemos creer que nuestra gente debe ser convertida o condenada, y hablar en un tono monótano? En el nombre de Dios, hermanos, esfuércense para despertar a sus corazones antes de subir al púlpito, para que estén listos para despertar a los corazones de los pecadores. Ay, no digas ni una sola palabra fría o sin importancia acerca de tan gran asunto que es el cielo o el infierno. Sea lo que sea, haz que la gente vea tu gran entrega y seriedad. Un sermón llena de meras palabras, por bello que esté compuesto, si falta alguna luz de evidencia y la vida de celo, es tan solo una imagen o un elegante cadáver." Richard Baxter

Los volúmenes que se han escrito respecto a este post (libros, bibliotecas) es amplio, solamente aquí el fin sera mostrar y enseñar a los ministros cómo predicar doctrinalmente. Entonces en este pequeño artículo sólo tengo el propósito de tocar una rama del sujeto, y eso es la predicación doctrinal directa.

La predicación doctrinal es el fundamento de toda verdadera experiencia cristiana. Sin una sólida base doctrinal, la experiencia cristiana es como las flores cortadas en el suelo, que pronto se marchitan y mueren. La verdad doctrinal no es sólo el fundamento, sino también la superestructura de toda predicación bíblica verdadera.

Las doctrinas cristianas no son nada menos que las verdades del cristianismo. La Biblia enfatiza que "toda la Escritura es útil para la doctrina ".

Generalmente, la objeción a la doctrina de la predicación se refiere a aquellas doctrinas que el objetor no le gusta.
  • Enunciados bíblicos explícitos
  • Palabras y frases doctrinales
  • Pasajes doctrinales extensos
Todas las afecciones y propósitos cristianos están inspirados por una visión de la verdad cristiana (doctrina). No hay verdades cristianas (doctrinas) que, si se presentan en sus debidas proporciones y en sus alrededores, no tienden a nutrir algunos afectos santos. No puede haber duda, por lo tanto, que es una parte fundamental de la verdadera predicación bíblica. Es deber del predicador hacer que estas verdades sean claramente entendidas como la condición misma de la fe verdadera, la vida santa y todo lo que está involucrado en la práctica correcta.

La predicación doctrinal es a veces estigmatizada como aburrida, muerta y no rentable. Se refiere como la ofrenda de huesos secos a las almas que anhelan leche pura y carne de la palabra. No negamos que puede haber alguna predicación doctrinal que merece esta carga, sin embargo, no es el contenido doctrinal, sino más bien la manera impropia en que es manejado por los predicadores. La predicación doctrinal no debe ser frío teológicamente -conferencias o dogmática polémica de argumentos. La doctrina debe estar siempre claramente definida y establecida y desarrollada en su contexto práctico y experimental. Por lo tanto, toda práctica cristiana debe basarse en doctrinas correctas y enraizadas en los principios cristianos para ser aquella que acompaña a la salvación.

Algunos pueden llamar a las doctrinas huesos secos. Debemos preguntarnos qué clase de cuerpo sería aquel que tiene carne y sangre pero que no tiene huesos. Por supuesto, si el predicador presenta la doctrina en la desnudez esquelética, aparte de una relación vital con la vida y la experiencia, es culpa del predicador y no la culpa de la verdadera predicación doctrinal.

La predicación doctrinal sana debe ser siempre práctica y experimental, aplicada a la necesidad y a las capacidades de los oyentes. De hecho, los dos nunca deben separarse más que la carne y los huesos deben ser separados. Si están separados, la muerte es segura.

Deben siempre mezclarse juntos para felicitarse y establecerse mutuamente, y ser impregnados por la unción del Santo.

El predicador doctrinal no necesita preocuparse de que la gente buena no asista a sus sermones. Generalmente he encontrado que la gente buena asistirá si el predicador les da algo que atender.

Jesucristo era un predicador doctrinal

En Marcos 1 aprendemos algunas lecciones importantes del Predicador de predicadores - el sabio Predicador Maestro mismo.

Primero, aprendemos que Él oró antes de predicar (Mr. 1:13). Estaba cuarenta días y noches en el desierto antes de que comenzara a predicar. Él oró antes de venir a Galilea predicando (Mr. 1:14). Nota en Mr. 1:35 "Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto,  y allí oraba." Inmediatamente después de haber orado, dijo a sus seguidores (v.38) "Vamos... para que yo pueda predicar... porque para este propósito he venido..." Él declaró muy claramente su propósito: "vino para predicar”.

En este capítulo podemos aprender algunas otras lecciones importantes del Maestro Predicador. En 1:22, 27 aprendemos que Él predicó con autoridad. En 1:41 aprendemos que predicó con compasión. Pero lo que quiero enfatizar es que Él fue un predicador doctrinal. Mr. 1:22, "Y ellos se asombraron de Su doctrina...." Mr. 1:27, "¿Qué doctrina nueva es ésta?" Esta pregunta nos dice claramente que Jesús era un predicador doctrinal.

Cuando Jesús dio a la iglesia sus órdenes de marcha la predicación era la prioridad: "Id por todo el mundo y predicad" (Mr. 16:15). En Mr. 16:20 vemos que ellos entendieron sus órdenes  "Y salieron y predicaron en todas partes",  la prioridad de la predicación.

La predicación doctrinal debe ser directa

El obispo JC Ryle tiene un muy buen consejo para todos los predicadores sobre la predicación directa. El obispo Ryle fue primer obispo de Liverpool y fue instrumento en la fundación de veinticinco iglesias. La doctrina, la experiencia y la práctica basadas y formadas por la Palabra pura de Dios eran para él lo esencial de la vida continua de la iglesia.

En el libro, The Upper Room , publicado por Banner of Truth, hay un capítulo llamado "Simplicity in Preaching". En este capítulo, Ryle da cinco pistas para lograr la sencillez en la predicación (deseo que todos los predicadores la estudien); la cuarta sugerencia nos ayudará a discutir la predicación directa. Una cita de su sermón:

La cuarta indicación es la siguiente: Si desea predicar simplemente, use un estilo directo. ¿Qué quiero decir con esto? Me refiero a la práctica y costumbre de decir "yo" y "tú". Cuando un hombre adopta este estilo de predicación, a menudo se le dice que es engreído y egoísta. El resultado es que muchos predicadores nunca son directos, y siempre piensan que es muy humilde y modesto y que se convierten en decir "nosotros". 

¿El predicador que a través de su sermón sigue diciendo "nosotros" se refiere a sí mismo y al obispo? o él mismo y la Iglesia? o él mismo y la congregación? o él mismo y los primeros padres? o él mismo y los reformadores? o a sí mismo y a todos los sabios del mundo? o, después de todo, él sólo se refiere a mí mismo, Si sólo se entiende a sí mismo, ¿qué razón terrenal puede dar para usar el plural, y no decir simplemente y claramente "yo"? Cuando visita a sus feligreses o se sienta junto a una cama de enfermo, o catequiza su escuela, o pide pan en el panadero, o carne en el carnicero, no dice "nosotros", sino "yo". ¿Por qué, entonces, me gustaría saber, no puede decir "yo" en el púlpito? ¿Qué derecho tiene, como hombre modesto, de hablar por alguien más que por sí mismo? ¿Por qué no levantarse el domingo y decir: "Leyendo en la Palabra de Dios.

Muchas personas, estoy seguro, no entienden lo que significa el "nosotros" del predicador. La expresión los deja en una especie de niebla. Si usted dice: Yo vengo aquí a hablar de algo que concierne a su alma, algo que debe creer, algo que debe hacer - usted está comprometido con el mensaje. Pero si empiezan a hablar en el vago número plural de lo que "nosotros" debemos hacer, muchos de sus oyentes no saben a qué se dirigen, y si están hablando a sí mismos o a ellos. Ruego y suplico a mis hermanos más jóvenes en el ministerio que no olviden este punto. Trata de ser tan directo como sea posible. No importa lo que la gente diga de ti.  Nunca digas "nosotros" cuando quieres decir "yo". Cuanto más tengas la costumbre de hablar claramente a la gente, en la primera persona singular, como hizo el viejo obispo Latimer, más sencillo será tu sermón y más fácil de entender.

George Whitefield, el evangelista más grande que jamás puso el pie en el suelo americano, tenía algunos distintivos que nos ayudarían. Un autor dijo de la predicación de Whitefield:

·         Él predicó un evangelio singular y puro: mucho trigo y poca paja.
·         Era preeminentemente en la manifestación de la verdad. Pecados - su corazón - Jesucristo - el Espíritu Santo - necesidad absoluta de arrepentimiento, fe y santidad.
·         Su predicación era singularmente lúcida y simple.
·         Era un predicador audaz y directo, no esa expresión abstracta "nosotros". "He venido a hablarte de sus almas." Había una vena constante de aplicación durante todo el camino a través del sermón, no una pieza de la cola pegada en el final. Esto es para USTED - USTED - USTED.
·         Era descriptivo. Se volvió las orejas de los hombres en los ojos.
·         La seriedad marcó toda su predicación.
·         El predicaba con patetismo y sentimiento.
·         La gloria de los sermones de Whitefield era en su franqueza.

William Perkins, uno de los grandes padres puritanos, en un Tratado, El arte de profetizar (predicar) tenía un capítulo titulado "Cómo usar y aplicar la doctrina".

Las formas de aplicación era lo principal y aquí un ejemplo de ellos.

ALGUNOS SON ENSEÑABLES - PERO TODAVÍA IGNORANTES. 

A estos hombres debe ser entregado el Catecismo. Hechos 18:25, Apolos fue catequizado ... en el camino del Señor. Perkins era muy fuerte en este punto. Él dijo: "El catecismo es la doctrina de la fundación de la religión cristiana, brevemente propuesto para la ayuda de la comprensión y la memoria, en preguntas y respuestas hechas por voz viva".

ALGUNOS TENEN CONOCIMIENTO - PERO NO SON AUN HUMILLADOS. 

En ellos debe despertarse el fundamento del arrepentimiento, es decir, un cierto dolor que es según Dios. El dolor según Dios, es una pena por el pecado simplemente porque es pecado. Bajo este punto Perkins dice cómo usar la ley para agitar el corazón.
Soli Deo Gloria



martes, 26 de septiembre de 2017

¿Seguiremos en Pecado?


“¿Quédiremos, entonces?¿Continuaremos enpecado para que la gracia abunde? ¡De ningún modo!Nosotros, que hemos muerto alpecado, ¿cómo viviremos aún en él?” (Romanos 6: 1-2)

Para los próximos dos capítulos, el Apóstol trata este asunto del pecado en la vida de los creyentes y cómo debe relacionarse con él y es interesante porque no nos da una fórmula de cómo no pecar sin antes darnos una imagen de los creyentes de su relación con la muerte, sepultura y resurrección de Jesucristo. En otras palabras, él nos está diciendo que a menos que estemos primero muertos con Cristo y resucitados a una nueva vida, toda nuestra lucha contra el pecado es inútil. El creyente es finalmente liberado del pecado por su identificación con la muerte, sepultura y resurrección de Jesucristo. Hemos muerto con Cristo (Romanos 6: 6) “sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado con El, para que nuestro cuerpo de pecado fuera destruido, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado.” Y estamos muriendo con Cristo (Romanos 6: 11). “Así también vosotros, consideraos muertos para el pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús.”

El cristiano es justificado por la fe en Jesucristo y lo que ha hecho El en la cruz y al salir de la tumba y en ese momento está unido con Cristo y su obra en la redención y luego en la santificación el trabajo continúa y se desarrolla en su vida. La vida cristiana se caracteriza por dos aspectos primordiales primero (positivo) Que él siempre encontrara en el Señor Jesús su esperanza, confianza, perdón, justicia, sabiduría y cualquier otro beneficio positivo en la persona y obra del Señor Jesucristo y segundo (negativo) él estará en esta continua batalla contra el pecado. Oh!  Amigos, por favor, no se mientan a sí mismos, si su pecado no le molesta y usted no está tomando medidas para deshacerse de usted no es un cristiano. Romanos 3:23 “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.”

Nuestro pecado es nuestra mayor carga porque es lo que puso a nuestro Señor en la cruz y ahora tenemos la victoria porque nuestras vidas ya no son nuestras porque hemos sido crucificados con Él. Pecamos porque recuperamos nuestras vidas y pensamos que hay algo más que Cristo y obediencia a la voluntad de Dios que nos traerá plenitud. Sin embargo, para el cristiano continuamente reconocemos que hemos sido crucificados con Cristo, “Ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.” (Gal. 2:20)

Pero ahora… (en Cristo)

A fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva. (Romanos 6:4)

Esta es la maravillosa verdad de nuestra identificación con Cristo. No sólo que Cristo murió por nosotros, sino que nosotros morimos con Él. Cuando el Espíritu nos bautizó en el cuerpo de Cristo, fuimos sepultado con Él y resucitados a una vida nueva.
Soli Deo Gloria



jueves, 21 de septiembre de 2017

¿Temor al Evangelismo?

Cuando fui a vosotros, hermanos, proclamándoos el testimonio de Dios, no fui con superioridad de palabra o de sabiduría, pues nada me propuse saber entre vosotros, excepto a Jesucristo, y éste crucificado.  Y estuve entre vosotros con debilidad, y con temor y mucho temblor. Y ni mi mensaje ni mi predicación fueron con palabras persuasivas de sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, para que vuestra fe no descanse en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios. (1 Corintios 2:1 -5)

En términos de tratar con el miedo y el evangelismo, creo que el punto de partida es darse cuenta de que no todo el miedo es malo. El miedo nos recuerda la importancia de la tarea de compartir el evangelio. No es algo que debemos tomar a la ligera, y también nos obliga a depender del Señor, y en ese caso, el miedo puede ser una cosa muy útil. Pero la mayoría de las veces cuando la gente habla de miedo y evangelismo, están hablando de un miedo que les impide compartir.

¿Cómo podemos definir el evangelismo? La respuesta del Nuevo Testamento es muy simple: el evangelismo es predicar el evangelio. Es una obra de comunicación en la cual el creyente pregona las Buenas Nuevas que nuestro Padre misericordioso nos enseñó. Cualquier persona que anuncia el evangelio, ya sea en una reunión grande o en una pequeña, desde el púlpito, desde la esquina o desde la cocina, está evangelizando.

Hay temores comunes que he observado. 

La primera no es saber lo suficiente
Tienen miedo de que se les haga una pregunta que no pueden responder, y les digo a la gente que no tienen que tener miedo de eso. Eso sucederá y siempre habran preguntas que no podrían responder. Y no hay pecado si hay honestidad en responder en decir, "No sé la respuesta," o, "Déjame investigar y te respondo."

Una segunda fuente común de miedo, la gente tiene miedo al fracaso
Tienen miedo de que puedan hacer más daño que bien, pero cuando escucho a alguien compartir que tienen miedo de que hagan más daño que bien, siempre pienso: "Ese no es tu problema",  pueda ser que necesitan más audacia.

Me encanta esta definición de evangelismo, Él dijo: El testimonio exitoso es compartir las buenas nuevas de Jesucristo en el poder del Espíritu Santo y dejar los resultados a Dios. No podemos cambiar el corazón de nadie. El testimonio exitoso es cuando compartimos las buenas noticias.

¿Tienen miedo? ¿Qué piensa esta persona acerca de mí si me identifico con Cristo? Pienso en los gobernantes de los que Juan habló en Juan 12. Muchos de los gobernantes creyeron en Jesús, pero a causa de los fariseos no lo confesaban para que no fueran expulsados ​​del templo. Y luego en Juan 12:43, nos dice, porque ellos aman la aprobación de los hombres más que la aprobación de Dios.

Tenemos que afrontar que nuestro miedo al rechazo es realmente amar la aprobación de los hombres más que la aprobación de Dios. Necesitamos amar a aquellos que no conocen a Cristo más que a nosotros mismos. En Hechos 4, vemos que los discípulos tenían miedo. Habían sido amenazados, y tenían miedo, ¿y qué hicieron? Ellos oraron por audacia. Creo que es una oración que Dios se complace en responder. Cuando tenemos miedo, simplemente reconocemos eso y decimos, Dios me temo, estoy asustado ahora mismo. ¿Me llenarías de audacia? Esa es una oración que Dios ama contestar. Alguien lo describió de esta manera. El miedo golpeó a la puerta, respondió la fe, y no había nadie allí.

El miedo nos obliga a depender del Señor, y en ese caso, el miedo puede ser una cosa muy útil.
"Una iglesia que escucha el evangelio predicará el evangelio."




Soli Deo Gloria



miércoles, 20 de septiembre de 2017

La Teología de la Liberación: Un Análisis

La Teología de la Liberación es un movimiento que anuncia la necesidad de la participación cristiana en los procesos sociales en la liberación de las clases bajas oprimidas económicamente y políticamente. Afirma la validez de cualquier medio para alcanzar esta liberación. Incluso recomiendan el conflicto armado, como necesario, si todos los medios pacíficos fracasan.

Sin embargo, la Teología de la Liberación no debe ser considerada como un mero llamado a los cristianos para ser más activos en la lucha en contra de la injusticia. Se parte radicalmente del punto de vista Cristiano tradicional sobre la teología, la historia, el hombre, e incluso sobre Dios mismo. 

Aunque la Teología de la Liberación comenzó dentro de la Iglesia Católica, se infiltra hoy en los rangos evangélicos, incluso entre pastores y líderes. Por este motivo, es imprescindible que entendamos como las bases del movimiento se distinguen de la teología Bíblica tradicional.

Al sacerdote peruano, Gustavo Gutierrez, se le considera el padre de la Teología de la Liberación. En la manera típica de los teólogos del movimiento, él nota la alianza tradicional de la Iglesia Católica con las clases ricas gobernantes. El denuncia eso como la "Mentalidad de la Cristiandad", causada según él, por percibir la realidad como dos planes separados de existencial: Lo espiritual arriba, y lo material aquí abajo. Esto, dice Gutierrez, ha provocado una cierta separación de las preocupaciones del mundo presente en favor del cielo después de la muerte. Estos dos factores principales, la ligadura con las clases altas, más una mentalidad malsana es la base de la opresión y de la pobreza en América Latina. Los teólogos de la liberación rechazan este dualismo teológico e insisten en que las dos dimensiones, tanto la espiritual como la terrenal, son inseparables. (1) 

El análisis de Gutierrez, y otros teólogos de la liberación, es preciso, sin duda alguna. Sin darse cuenta, Gutierrez se acerca mucho a la teología de la Reforma Protestante. Los teólogos Protestantes han rechazado siempre esta separación de las dos dimensiones como una mentalidad anti-bíblica. No piensan de la realidad como dos planos distintos con su planta baja terrenal y la planta alta espiritual. Aunque reconocen la existencia de las dos dimensiones, piensan en ellas como dos engranajes entrelazados. Ambas dimensiones son lógicas e importantes. Aunque diferentes, no se contradicen. 

Es difícil, por lo tanto, encontrar defectos en el análisis de los problemas como los teólogos de la Liberación lo presentan. Tampoco se puede negar la necesidad del activismo Cristiano frente a la opresión. Tal crítica, en realidad, sería muy hipócrita por parte de los cristianos latinoamericanos si lo hicieran, porque tuvieron una revolución hace 200 años para deshacerse de la colonización y la opresión española. ¿En base a qué, pues, les negaríamos el mismo derecho hoy a los latinoamericanos?

En esto se halla la dificultad para analizar un movimiento controversial como es la T.L., porque contiene una mezcla complicada de lo bueno con lo malo. Por eso, es preciso que los Cristianos serios escudriñen el asunto a la luz de las Escrituras para distinguir lo correcto de lo incorrecto.

El mensaje de salvación BIBLICO (en oposición a las distorsiones de ello por algunas iglesias tradicionales) liberta la mente del pueblo de su concepto como seres destinados a la pobreza y a la miseria. La Palabra de Dios aumenta su sentido de autovalor como seres humanos amados por un Dios eterno. La Biblia enseña claramente como los humanos deben tratarse entre si. Todo esto prepara el despertar mental y moral, lo que es necesario para forzar cambios sociales extensos. Y yo uso la palabra "forzar" a propósito.

Algunos insisten en que la Cristiandad ha fracasado en varias regiones del mundo, incluyendo en América Latina, porque no ha producido los cambios sociales esperados. En cambio, yo afirmo que en todos los lugares donde el Evangelio supuestamente ha “fracasado", se puede demostrar una de dos cosas: Primero, que el Evangelio fue rechazado por la gran mayoría de la gente. (En tal caso, la culpa no es del Evangelio) O, el supuesto "Evangelio" que fue anunciado, no era el Evangelio Bíblico de la Justificación Por La Fe sin méritos, sino una perversión fétida que no era en forma alguna el Evangelio.

Ya sea grande o poco el impacto del Evangelio sobre la sociedad, los cristianos deben evitar dar la impresión que los cambios sociales son el mayor propósito del Evangelio. Una sociedad justa y equitativa NO ES el mayor propósito del Evangelio. Su valor NUNCA debe ser medido por tales resultados. Los cristianos deben poner en claro que la verdad y la moralidad son absolutas, universales y eternas. Predicamos el Evangelio simplemente porque es la verdad; sea que traiga cambios sociales o no. Este motivo para predicar no es solamente el mejor. Es el único aceptable. Afirmar lo contrario es caer en la filosofía del Consecuencialismo, es decir, la noción de que la verdad y el error, lo correcto y lo incorrecto se determinan por sus consecuencias. Esta es filosofía anti-cristiana, algo que todo creyente debe rechazar con vehemencia. No debemos ni soñar en ceder sobre este punto. Es precisamente sobre este punto que comenzamos a ponernos en desacuerdo con la Teología de la Liberación.

PUNTOS DEBILES EN LA TEOLOGIA DE LA LIBERACIÓN
(Debilidades Teológicas)

A. SU FILOSOFIA BASICA 

La base filosófica de Gutierrez para evaluar la verdad es nada más que la teoría Marxista de La Determinación Económica y Social. El Determinismo Marxista declara que las consideraciones económicas dentro de las clases sociales determinan todo lo que la gente va a creer y hacer. Las diversas creencias son causadas por la interacción materialista de los hombres en sus clases sociales y no pueden tener validez objetiva fuera de ella. Mas, el bienestar del hombre es la realidad última, y la diferencia entre la verdad y el error debe ser medida por este criterio y nada más. Según el Determinismo Marxista, lo que contribuye a la lucha de clases hacia una sociedad socialista utópica es buena, sea la guerra o la paz, asesinato o caridad.

Gutierrez no hace caso a la contradicción absurda escondida en esa teoría. Si las creencias no tienen validez porque son nada más que el fruto de una determinación económica, entonces, ¿qué del Marxismo mismo? ¿No es ello una creencia? Si, pues, ello ocurre por determinación económica, entonces pierde también validez. Pero como todos los Marxistas o teólogos de la liberación, la lógica sirve para adquirir lo que quieren. Pero cuando la lógica les contradice, no hacen caso.

Gutierrez revela la base de su pensamiento al citar lo siguiente de Karl Barth: "El hombre es la medida de todas las cosas en vista de que Dios se hizo hombre." (2) En esto reconocemos al instante la primera presuposición de la filosofía anti-cristiana conocida como “HUMANISMO". Tal dicho no es cristiano. Tampoco es cristiana la última parte de la cita, considerando que no existe conexión lógica entre la encarnación de Cristo y la exaltación del hombre como la medida de todas las cosas. 

Si cabe duda en la mente del lector de que la base filosófica de la Teología de la Liberación es nada más que el Marxismo disfrazado, notemos esta cita del teólogo Kirk: 

Aplicando la dialéctica a la comprensión teológica, descubrimos  que el método de Marx, es, ahora, la mejor manera para entrar en una comprensión contemporánea del texto Bíblico.

¡Increíble! según Kirk, ¡No podemos entender la Biblia sin Marx! Tales afirmaciones invitan a los cristianos serios a que rechacen a primera vista la Teología de la Liberación. Para los cristianos evangélicos esto es grave, porque reconocemos que la Biblia se interpreta por la Biblia, no por algún ateo comunista. La Confesión de Fe de Westminster, una de las más antiguas y respetadas confesiones lo expresa de esta manera:

"El consejo entero de Dios, tocante a todas las cosas necesarias por Su propia gloria, la salvación de hombre, la fe y la vida están expresados en las Escrituras, o por buena y necesaria consecuencia puede ser inferido de las Escrituras." 

Gutierrez y Kirk dicen que los eventos históricos evalúan la verdad. La Biblia juzga a todos, y ella no es juzgada por nadie. La Palabra de Dios juzgará las acciones de los hombres, no viceversa. 

Así, la Teología de la Liberación representa una amenaza a la Cristiandad Bíblica, más allá de un mero llamado a la acción social. Es un intento de abandonar la Biblia como la medida final de las acciones humanas y adoptar en su lugar un pragmatismo histórico. Una de estas bases filosóficas está errada: la de la Biblia, o la de la Teología de la Liberación. El lector decidirá. 

B. MANIPULACION SEMANTICA 

Los teólogos izquierdistas son famosos por un juego que llamamos la "manipulación semántica". Esto quiere decir, usar palabras Bíblicas o religiosas de una manera totalmente diferente de la que los escritores de la Biblia querían. Es como si una palabra Bíblica fuera una copa que estos teólogos tomaron, y luego de vaciar su contenido, la echaron otro contenido a su propio antojo. Los que no han tenido entrenamiento teológico son a veces engañados porque tal manipulación da una impresión de autenticidad y ortodoxia a las enseñanzas de estos teólogos, aunque comunican conceptos extranjeros al pensamiento Bíblico. He aquí algunos ejemplos:

"Solo Marx entre los filósofos modernos comparte la fe profética de Israel: su Mesianismo y su pasión por la justicia vienen de la Biblia." (Kirk, "Teología de la Liberación", P.82) 

¿Cómo es que a un ateo como Marx, enemigo intransigente de la cristiandad, le atribuyen una "fe profética"? Simplemente por vaciar las palabras "fe" y "profética" de su significado original como uno ungido de Dios por el Espíritu para anunciar la Palabra Divina, y luego llenar estas palabras otra vez con la noción de una persona que entiende procesos históricos y el triunfo final del Comunismo. El "Mesianismo" ya no es la promesa de un Salvador Divino que quita el pecado, sino un salvador humano que quita el Capitalismo. Más, si la pasión de Marx por la justicia provenía de la Biblia, ¿por qué era ateo? La Biblia siempre define la justicia como obediencia a la ley divina.

Otro teólogo de la Liberación, José Miranda, le da a la palabra "pecado" otra definición: 

"Marx y San Pablo coinciden en su intuición de la totalidad de la maldad:...Pablo le llama a esta totalidad, 'mundo'. Marx le llama 'Capitalismo'." (3) 

Con un poco de manipulación verbal, la definición bíblica de la palabra "pecado", como transgresión de la ley divina, ha sido echada fuera. Ahora oímos de Miranda que "pecado" quiere decir “Capitalismo". Aunque Miranda no lo dice con tantas palabras, aparentemente piensa que si Pablo viviera hoy, sería un buen Marxista; ¡o que el ateo Marx sería un buen cristiano! 

Algunos de los dichos de estos teólogos son realmente divertidos. El teólogo Schillebeeckx (de Holanda) dice: 

"...el reino de Dios consiste en hacer el mundo un lugar mejor. Solamente así podré describir lo que significa el reino de Dios."
¡Imagínese! Jesús dio l3 parábolas en el evangelio de San Mateo sobre el reino de Dios. Todas son fáciles de interpretar. Sin embargo, ¡este teólogo no tiene ni la menor idea de lo que es el reino de Dios hasta que el mundo mejore! 

C. CRISTOLOGIA DEBIL (Doctrina Tocante a Cristo) 

Aunque la Biblia anuncia francamente el Señorío absoluto de Jesucristo, tales afirmaciones están notablemente ausentes en la Teología de la Liberación.

El Señor Jesucristo reclamó lo que el Padre le había dado, "Toda potestad en el cielo y en la tierra." Mt. 28:18 Pero la humanidad está en rebeldía en contra de esta autoridad. Este es el problema fundamental del hombre y la fuente de cualquier otro problema. Según la Biblia, la solución es la obediencia a Dios y a sus leyes, con sumisión a la autoridad suprema del Señor Jesucristo. Sobre este punto las Escrituras son intransigentes: Si el hombre no se somete a Dios y no obedece sus leyes, no hay esperanza. Dios promete el fracaso de todo sistema que no está basado en la obediencia a El.

Pero los teólogos de la Liberación insisten en que el pueblo tiene derecho a la auto-determinación. ¿Tienen razón? Si quieren decirlo en un sentido absoluto, la respuesta es ¡NO! El hombre tiene autonomía solamente dentro de los límites de las leyes de Dios. Fuera de estos límites, el hombre es transgresor y será juzgado por serlo. 

En esto estriba la gran paradoja de la cristiandad, paradoja que el hombre pecaminoso no aguanta oír: Servirle a Jesús es la libertad más grande del universo.

¿Reconocen esto los teólogos de la Liberación? Note lo que dice Gutierrez:

"Así el hombre poco a poco agarra las riendas de su propio destino” (P.29) "El hombre, maestro de su propio destino." (P.27)


En resumen, los cristianos deben hacer entender que "Nosotros el pueblo...", está siempre precedido por "Yo, El Señor..." 

D. SOTERIOLOGIA DEBIL (Doctrina de la Salvación)

"El hombre se salva si se abre a Dios y a los demás, incluso si no se da cuenta que está haciéndolo." (3)

Así Gutierrez atribuye la clave de la salvación a algo que el hombre produce en si mismo por actividad social. Pero la Biblia dice, "Por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros, pués es don de Dios; no por obras para que nadie se gloríe." Ef.2:8-9

La base entera de la doctrina de la salvación de la Teología de la Liberación es simplemente una expresión de la auto-decepción favorita de la humanidad: Que el hombre pecaminoso puede contribuir algo para su salvación. Sin esta presuposición, nada en la Teología de la Liberación tiene sentido. Pero nosotros como cristianos evangélicos no podemos conceder esta presuposición porque la misma Biblia no la concede. 

E. ESCATOLOGIA DEBIL (Doctrina de las Ultimos Eventos) 

El capítulo ll del libro de Gutierrez tiene por título "Escatología y Política". En el, se explica la esperanza de Gutierrez para el futuro. El hombre, al reconocer su dignidad, debe luchar con fe en contra de las fuerzas sociales que le oprimen. Esto resultará eventualmente en la creación de una sociedad justa e imparcial. Por este proceso, el hombre contribuye a la entrada del reino de Dios en el mundo. Gutierrez dice, "El Evangelio no provee ninguna utopía para nosotros; esto es una obra humana." P.238 
Tiene razón, en parte. Dios quiere que trabajemos para mejorar la humanidad y para la creación de una vida mejor en la tierra. Es decir, todos somos responsables de obedecer la ley de Dios, lo que incluye el amor al prójimo. Si podemos crear una sociedad justa y equitativa en la tierra, pues, hagámoslo. 

Lo único que se critica en este punto de vista de la Teología de la Liberación, es la presuposición de que eso va a suceder. Si los teólogos de la Liberación conocieran mejor sus Biblias, pensarían de otra forma. 

La Biblia dice que Cristo regresará después de que la humanidad se haya casi exterminado. Luego volverá a establecer su reino. Separará a sus fieles de los demás que serán juzgados. Las cosas van a ir empeorando hasta que venga Jesús. 

A la luz de la Biblia, ¿Cómo puede algún teólogo "cristiano" imaginar que habrá una utopía socialista en la tierra? 

¿Significa eso que debemos abandonar la lucha y no hacer nada? NO! No rechazamos la medicina simplemente porque algunos pacientes morirán de todas formas. El cristiano no debe vivir con los brazos cruzados esperando la segunda venida de Cristo, no haciendo nada por los demás. El cristiano es realista. Entiende que la maldad sale del corazón del hombre y no de la sociedad en que vive. Pero sabe también que existe UNA SOLA solución para los problemas de la humanidad...obediencia a Dios.

Deficiencias Políticas y Económicas

A. UN CASAMIENTO MAL HECHO

Los que conocen poco de la Teología de la Liberación pueden fácilmente suponer que es nada más que un llamado a los cristianos para la acción social, y que las tendencias izquierdistas de algunos de estos teólogos son coincidencias. Pero tal suposición es errónea. Una boda entre el Marxismo y la Cristiandad se ha efectuado y fue bien planeada.

Se ve que la base filosófica de la Teología de la Liberación es la filosofía Marxista sobre la verdad y la historia. Hasta la misma Biblia se evalúa por ella. La manifestación suprema del pecado se llama "capitalismo". La esperanza del hombre para el futuro es, según la Teología de la Liberación una utopía socialista. El "profeta" más grande del siglo veinte, con visión "mesiánica" es Karl Marx. 

Que nadie imagine que lo que estamos diciendo es simplemente una acusación reacionaria en contra de los que tienen tendencias izquierdistas. Son los mismos teológos de la Liberación que insisten en tal unión. Sabiendo esto, ¿no nos corresponde preguntar lo que los teólogos de la Liberación están intentando llevar a cabo? Se interesan de veras en ayudar a los pobres? O es un intento para hacer que los cristianos escuchen el Marxismo? Si así no fuere, Por qué insistir en tal unión entre el Marxismo y la Cristiandad? 

B. ¿EXITOS SOCIALISTAS? 

De todos los motivos para no asociarse con el Socialismo, el siguiente es el mejor: El socialismo es un fracaso. Prueba de esto son las siguientes verdades: 

Primero, es otra forma de opresión. Mientras que los bienes son distribuidos con más igualdad, eso ocurre al costo de la iniciativa personal y de las libertades de todos. Miles de personas cada año arriesgan sus vidas para escapar de estas “utopías” socialistas. 

Segundo, el socialismo es un parásito de la pobreza. No puede existir en la presencia de la prosperidad. La naturaleza humana es tal que al instante en que la gente empieza a prosperar y adquirir bienes, pierden todo deseo de compartir. Por este motivo, los países socialistas tienen que mantener a su pueblo en una pobreza relativa. Cualquiera de estos dos extremos, la pobreza brutal o la prosperidad, ponen en peligro al gobierno socialista. Si prosperara demasiado, el pueblo dejaría el socialismo. Si se empobreciera demasiado, se rebelaría. Eso explica por qué ningún país socialista ha alcanzado, ni alcanzará, el nivel de vida como los Estados Unidos, Europa, y otros países capitalistas. Lejos de ser utopía, el Socialismo/Marxismo es una garantía de nunca alcanzar aquel estado de bienestar que anhelan.

Tercero, los que han vivido bajo el socialismo están abandonándolo.

C. EL CAPITALISMO: ¿Es Una Palabra Sucia? 

Los teólogos, filósofos y profesores de universidades, tienen talento para injertar presuposiciones escondidas en sus obras de una manera tan astuta, que los indoctos aceptan sus argumentos sin darse cuenta del engaño. Dan la impresión que ciertas cosas son demasiado obvias para que valga la molestia de una explicación. Para ellos son los insensatos no-intelectuales que cuestionan sus presuposiciones. Es cuando les desafiamos a comprobar sus presuposiciones que aparece lo vacío de su posición. 

Ejemplo: Para los teólogos de la Liberación, es demasiado OBVIO que el Capitalismo es una gran maldad. José Miranda lo llama la manifestación final del pecado. ¿Qué bruto cuestionaría eso? Gutierrez dice que la humanidad se divide en dos clases: "opresores y oprimidos; dueños de los medios de producción y los que son despojados del fruto de su trabajo." Para el, es obvio que los propietarios de los medios de producción estén oprimiendo a los demás. Los dueños de las fábricas son categóricamente malos, sin excepción. Para ellos, esto es obvio. 

Pero no es tan obvio para mí. Y yo quisiera cuestionarlo. No pienso que la palabra “Capitalismo” es sucia. La palabra “sucia” es OPRESION. Claro, el Capitalismo puede llegar a ser muy opresivo si se permite que corra desenfrenado, como es el caso a menudo en el tercer mundo. Pero lo mismo es verdad del Marxismo. Si el lector duda de esto, que hable con uno de estos que han escapado de un país comunista.

Los que toman la iniciativa, que arriesgan su dinero, que usan la lógica, la planificación creativa, merecen avanzar más que los que no lo han hecho así. Eso no es una opresión. Tampoco acepto yo la presuposición izquierdista de que la única manera de prosperar es quitarles a otros lo que les pertenece. Si uno produce algo que beneficie a todos, merece su recompensa. Una economía libre, sin abusos, hace esto. 

Resiento las opciones absolutistas de la Teología de la Liberación que intentan hacerme escoger entre un Capitalismo explotador de un lado, y el Marxismo del otro lado. No me gusta la acusación de que no soy buen cristiano si no escojo el Marxismo. Existen otras opciones.

UNA SOLUCION

La necesidad de cambios en nuestros países puede ser resumida en dos palabras: REFORMA Y REVOLUCION.

Por "reforma" quiero decir una Reforma Protestante de la clase que liberó la mayor parte de Europa y preparó el camino para las reformas socio-económicas que hicieron posibles la prosperidad de estos países que son mayormente de fe protestante hoy.

Las supersticiones idólatras que ocupan el tiempo y el dinero de la gente común serían destruidas. La dignidad y auto-valor del individuo serían restauradas para que uno no se vea obligado a resignarse a la miseria para tener una vida mejor en el cielo. Su mente sería despertada. El anti-intelectualismo se iría. No aceptará más los dogmas basados en autoridad eclesiástica, pero formaría sus propios puntos de vista basados en la lectura de la Palabra de Dios. Su mente alcanzaría el poder de razonamiento abstracto hasta entender otras ideas abstractas también, tal como la democracia.

Por "revolución" quiero decir la ruptura del poder de las clases ricas gobernantes y una re-distribución imparcial de las tierras; la destitución del poder de los oficiales militares ricos que interfieren en los procesos democráticos; la creación de un sistema democrático (no Marxista/Socialista) que sea democrático en verdad; no una farsa patética como la que existe en algunos países.

RESUMEN GENERAL
La Teología de la Liberación es muy correcta en su análisis de los problemas sociales; correctos para criticar el vínculo de la Iglesia Católica con las clases gobernantes. Pero se equivoca al abandonar la Biblia como criterio de la verdad Cristiana en favor de una filosofía Marxista. Los que hacen eso deben dejar de llamarse "cristianos". Están errados al definir la teología como "la reflexión crítica del hombre sobre si mismo". (Cita de Gutierrez) Eso es Antropología, no Teología. Tal método teológico pervierte todas las ramas de pensamiento Bíblico.
BIBLIOGRAFIA
(1) Gutierrez, Gustavo UNA TEOLOGIA DE LIBERACION (Libros Orbis,
N.Y. l973) P. l0-13 
(2) Ibid, P.7 
(3) Ibid, P.l5l
Por  Roger L. Smalling, M.Å
Soli Deo Gloria


Revisión del libro: Jesús en cada página por David Murray

En esta oportunidad deseo compartir lo que encontré y también invitar a otros que están conociendo más de la teología Bíblica y puedan leer y revisar una copia del libro de David Murray, Jesús en cada página (Jesús on Every Page).  Esperando beneficiarnos y recomendar a otros.

Es Jesús en cada página El Dr. Murray nos da una descripción bien descrita sobre el mensaje de toda la Biblia, sobre la historia de la redención hecho por Jesucristo. El Dr. Murray no deja ninguna piedra sin mover para demostrar que de hecho "Moisés y todos los profetas" hablan de Jesús y su obra (vea Lucas 24:27).

Hay mucho en este libro vale la pena elogiar. Me gustaría enumerar las tres cosas que más me gustaron:

Está claro - el Dr. Murray es muy agradable en cómo escribió este libro. Parece como si estuviera sentado en la habitación contigo en lugar de estar detrás de un atril.
Es exhaustivo - el Dr. Murray cubre todas las formas en que Jesús es visto en el Antiguo Testamento. Sólo para nombrar algunos, él cubre a Jesús como se ve en los personajes, leyes, historia, profetas, tipos y poemas del Antiguo Testamento. Y Jesús en los pactos presentes.
Es accesible - esto es un trabajo teológico pero es una lectura fácil. El Dr. Murray hace la teología legible y agradable. Esta es una teología bien hecha.

Este libro debe encontrar su camino en muchas iglesias. Me animaron mucho a ver las preguntas de discusión para cada capítulo incluido. Esto haría un gran recurso para el estudio personal o para grupos pequeños. Las copias están disponibles AQUÍ en Amazon.

Sugerencias de otros libros en español para estudiar Teología Bíblica.
Predica - La centralidad de Cristo en la predicación. Por Edmund Clowney
El Misterio Revelado.  Por Edmund Clowney
Como Predicar de CRISTO usando toda la Biblia. Por Graeme Goldsworthy
Evangelio y Reino. Por Graeme Goldsworthy
El gran panorama Divino. Por Vaughan Roberts
Predicar: La Gran Historia de Dios. Por Phil Crowter
Salmos de Guerra del Príncipe de Paz. Por Jaime Adams
El Relato Divino. Por Vang, Preben & Carter, Terry G.

Soli Deo Gloria


martes, 19 de septiembre de 2017

¡He aquí, vengo pronto!

Apocalipsis 22: 7 "He aquí, yo vengo pronto." 

Apocalipsis 22:12 "Y he aquí, vengo pronto." Pero aquí tenemos las últimas palabras de él "que viven, y estaban muertos; y he aquí que está vivo para siempre "(Apocalipsis 1: 18). El que tiene las llaves de la muerte y el infierno. Si alguna vez hubo palabras a las cuales deberíamos prestar nuestra atención completa, indivisa y más seria, es a estas palabras de "Jesucristo, el testigo fiel, y el primogénito de los muertos, y el príncipe de los reyes de los tierra "(Apocalipsis 1: 5). ¿Cuánto más debemos prestar atención al Rey de reyes y Señor de señores cuando Él no habla una sola vez ni dos veces pero tres veces, su última palabra a la iglesia y al mundo fue. "He aquí ciertamente, vengo pronto."

Estas palabras son casi las últimas palabras del último libro inspirado e infalible de las Escrituras de Dios.

Yo vengo pronto. "Los burladores se burlarán, de ese día está fijado y designado en la corte del cielo cuando el Padre diga: "HECHO!", Pero cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los ángeles con El, entonces se sentará en el trono de su gloria; y serán reunidas delante de El todas las naciones; y separará a unos de otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos. (Mateo 25: 31-32). Entonces todas las almas de los redimidos que murieron en el Señor y todos los ángeles lo seguirán mientras regresa una vez más a la tierra, esta vez en la plena gloria y esplendor que es suyo como el Hijo de Dios. Y esto hará como dijo: " 
He aquívengo pronto."

Si una persona nos diera su palabra directamente diciendo que viene y que viene rápidamente, nos prepararíamos de inmediato y completamente para su llegada. Y entonces, ¿qué tan cuidadoso y ansioso seríamos para vigilar, mirando constantemente hacia fuera y buscando el momento en que aparecería a nuestra puerta?. Oh, pero tristemente, el Rey de la gloria les ha enviado a decirles a todos que Él viene y rápidamente, sin embargo, cuán pocos han escuchado su anuncio, cuán pocos se están preparando, cuán pocos están esperando ansiosamente, esperando el momento, Él viene rápidamente.

La mayor parte de la humanidad se vive como si el Señor nunca hubiera pronunciado estas palabras una sola vez, olvidando por completo que las había dicho tres veces más. Y muchos de entre esa vasta multitud... ¿eres uno de esos?  Muchos entre la inmensa multitud de los descuidados han ido más allá de mera negligencia y se han burlado de esta promesa. Son como los que en los días del Apóstol Pedro dijo: "¿Dónde está la promesa de su venida? porque desde que los padres se durmieron, todas las cosas continúan como estaban desde el principio de la creación"(2 Pedro 3: 4). Se burlan y se burlan y se burlan diciendo, ¿dónde está este Jesús? ¿Qué es de Él? Han pasado dos mil años desde que se fue y no hay señales de él. Estos burladores han olvidado aquella palabra más inspirada del apóstol Pedro: "No ignoréis esto, que para el Señor un día es como mil años y mil años como un día" (2 Pedro 3: 8). 

Si estos burladores hubieran considerado la espantosa venganza con que Dios borró a todo un mundo de impíos, de una sola vez, seguramente no se burlarían de su amenaza de un juicio igualmente terrible. Se declara por la misma palabra que los cielos y la tierra que ahora son serán destruidos por el fuego. Esto ocurrirá con tanta certeza como la verdad y el poder de Dios pueden hacerlo. Aquí se enseña y afirma a los cristianos en la verdad de la venida del Señor. Aunque, según cuentan los hombres, hay una gran diferencia entre un día y mil años, según la cuenta de Dios no hay diferencia. Todas las cosas, pasadas, presentes y futuras, están siempre delante de Él; la tardanza de mil años no puede ser tanto para Él como para nosotros es postergar algo por un día o por una hora. Si los hombres no tienen conocimiento ni fe en el Dios eterno, se inclinan a pensar que Él es como ellos. ¡Qué difícil es formarse la idea de la eternidad! Lo que los hombres cuentan como tardanza, es paciencia, y es a favor de nosotros; es para dar más tiempo a su pueblo para que avance en conocimiento y piedad, y en el ejercicio de la fe y la paciencia, para que abunde en buenas obras, haciendo y sufriendo aquello para lo que son llamados, para que puedan dar gloria a Dios. (Matthew Henry)

Y esto no es una reaparición desnuda. Él viene por esta razón, para juzgar la tierra, cada hombre y mujer. En aquel día, cuando El regrese, "todo ojo le verá, y también los que le traspasaron; y todas las tribus de la tierra se lamentarán por causa de él" (Apocalipsis 1: 7). Sí, todos los ojos lo verán, los ojos de los reyes y los mendigos, los de los ricos y los pobres, tus ojos y los míos. Los muertos en sus sepulcros serán resucitados, y juntamente con los vivos en ese día lo levantarán y lo verán venir como Judas ha escrito "con diez mil de sus santos, para ejecutar el juicio sobre todos y para condenar a todos los impíos de todas sus obras de impiedad, que han hecho impíamente... "(v. 14, 15).

Las Escrituras se refieren a este día como el día grande y terrible del Señor. Exactamente así será para cada pecador y cada escarnecedor en el regreso del Señor. Todos los que no se arrodillan ante Cristo en este cuerpo mortal, se doblarán de rodillas en su cuerpo resucitado y confesarán con su lengua que Jesucristo es Señor para la gloria de Dios Padre. Escucha la descripción de la escena de aquel gran día cuando Él viene rápidamente  (Apocalipsis 20: 11-15). 

"Y vi un gran trono blanco, y el que estaba sentado sobre él, de cuya cara huyeron la tierra y el cielo; y no hallaron lugar para ellos.

Y vi a los muertos, pequeños y grandes, que estaban delante de Dios; y se abrieron los libros, y se abrió otro libro, que es el libro de la vida; y los muertos fueron juzgados por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. Y el mar entregó los muertos que estaban en él; y la muerte y el infierno entregaron los muertos que estaban en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. Y la muerte y el infierno fueron arrojados al lago de fuego. Esta es la segunda muerte. Y cualquiera que no fue hallado escrito en el libro de la vida fue arrojado al lago de fuego."

Oh, lector, ¡qué terrible día será para todos, para vosotros, si no os habéis arrepentido y creído, si no os habéis apoderado de Cristo por la fe como Redentor antes de aquel día! Considere cuidadosamente esta palabra solemne - si usted no ha conocido al Señor Jesús como su Salvador en esta hora presente, entonces lo conocerá como su Juez en la hora en que Él viene rápidamente, y Él pronunciará su condena en esa hora antes de que los reunidos universo de hombres y ángeles.

Piensa por un momento lo que será cuando el Señor de los ejércitos se sienta sobre su trono de juicio. Todo su ojo que ve, penetrará en todo corazón y hará que cada pecador conozca cada pecado que haya cometido. Entonces confesarán delante de él y de aquella vasta asamblea que su sentencia será justa cuando les declare: "Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles" (Mateo 25:41). ¿Y quiénes son estos malditos? De este mismo último libro de la Escritura inspirada tenemos esta descripción: son "Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los fornicarios, los hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos que tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la segunda muerte "(Apocalipsis 21: 8).

¿Crees que no estás en la lista? ¿Dices que estos no son mis pecados? Ellos SON, porque la Escritura declara claramente "cualquiera que guarde toda la ley, y sin embargo ofenda en un punto, es culpable de todos" (Santiago 2:10). Si todavía estás fuera de la seguridad del perdón de los pecados a través de la sangre de Cristo Redentor, estás en este momento dentro de la justa condenación de Cristo el Juez que es fuego consumidor (Hebreos 12:29) y todo lo que espera es la ejecución de su sentencia. Lector, no deseche estas palabras como cuento o mitos para los débiles de mente. Tú tienes el testimonio de los profetas y apóstoles, el testimonio de los ángeles, y la palabra de Jesucristo mismo, no una ni dos veces, sino tres veces la verdad: "He aquí, vengo pronto".

¿No debemos entonces alegar cuando las cosas de la eternidad están delante de nosotros? Si el edificio en el que estás ahora está en llamas, ¿no dirías claramente y directamente a todo el interior instándolos a huir y escapar del peligro? ¡Cuánto más entonces debemos ser claros y directos cuando no sólo nuestros cuerpos, sino nuestras almas están en peligro eterno!

Vengo rápidamente - consuma sus pensamientos, y que ellos sean un grito incesante en sus oídos para huir a Jesucristo A arrepentirse de sus pecados y creer en su sangre derramada como su única esperanza de purificación de ellos. No tomar cuidado oportuno será para usted como el Señor dijo, "el último estado de ese hombre es peor que el primero" (Mateo 12:45). Para el pecador, ese día cuando el Señor venga pronto será como el profeta Sofonías lo describe como "un día de ira, un día de angustia y aflicción, un día de desolación y desolación, un día de tinieblas y oscuridad".

Pero hay otra escena en ese día que merece la atención. Pero  será diferente será el carácter de ese día para los redimidos por la sangre del Cordero. Porque ese día cuando Él venga pronto será un día de gozo y deleite para el creyente. Oh, ustedes que son los creyentes, "levante sus cabezas para que su redención se acerque" ... porque He aquí, Él viene rápidamente! ¡Lo veremos con ojos inmortales e incorruptibles en ese día! El que es el resplandor de la gloria de su Padre y la imagen expresa de su persona, lo veremos con nuestros propios ojos. Incluso Moisés no pudo soportar la visión de la gloria de Dios en la tierra, pero en el día que el Señor Jesús viene rápidamente, se cambiarán nuestros cuerpos viles, y que deberá contemplarle los santos de Dios, "ahora nuestra salvación está más cerca que cuando creímos" (Romanos 13:11) y en ese día cuando Él venga pronto, nuestra salvación será completa. Habrá plenitud de gozo y placeres para siempre en su mano derecha. En aquel día todos los redimidos serán como él, porque lo veremos cómo es, y que puede concebir hasta la menor parte de él, porque no ha visto oído, ni oído, ni ha entrado en el corazón del hombre lo que Dios ha preparado para los que le aman.

El Rey en su belleza. ¿Quién puede saber lo que será esa vista con simples palabras humanas? Veremos a los ojos de Aquel que nos vio en la eternidad pasada, que nos amó con un amor eterno y que nos atrajo en amor hacia sí mismo. Sus ojos brillarán con deleite cuando vea a su esposa, la iglesia, adornada de blanco, sin mancha ni arruga ni cosa semejante, y nosotros, a su vez, lo miraremos con una admiración sin mancha y sin mancha por el pecado y la fragilidad más tiempo. Pecador, teme y tiembla porque "¡He aquí, vengo pronto!" Huid a Cristo como Salvador mientras tenéis este momento en el tiempo. Y hermano, regocíjate por esta palabra: "¡Ciertamente, vengo pronto!"

Veremos Su gloria, sí, y veremos sus heridas. Esas heridas que recibió en el Calvario, ahora se hicieron aún más gloriosas por la plenitud de esa gloria que tuvo con el Padre antes de que el mundo comenzara. Veremos sus manos traspasadas y sus pies heridos y su lado destrozado, y adoraremos al Cordero de Dios para siempre y cantaremos "un cántico nuevo, diciendo... que fuiste muerto, y nos has redimido a Dios por tu sangre de toda parentela, lengua, pueblo y nación; Y nos has hecho a nuestro Dios reyes y sacerdotes "(Apocalipsis 5: 9-10a).

Veremos su gloria y veremos sus heridas, pero también veremos su rostro. Por primera vez, innumerables multitudes de redimidos mirarán el rostro de su querido Redentor con ojos hechos capaces de llevar la gloria. ¿No nos hemos preguntado de vez en cuando cómo será? ¡En ese día, cuando Él venga pronto, lo sabremos! Veremos los ojos de Aquel que nos vio en la eternidad pasada, que nos amó con un amor eterno y que nos atrajo en amor hacia sí mismo.

Entonces veremos su sonrisa mientras Él se regocija sobre nosotros con alegría, y escucharemos su voz por primera vez con nuestros oídos, y hará que nuestros corazones salten dentro de nosotros mientras Él habla esas palabras maravillosas: "Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde antes de la fundación del mundo." 
EN PRESENCIA ESTAR DE CRISTO 

En presencia estar de Cristo,
ver su rostro, ¿Que será
Cuando al fin en pleno gozo
mi alma le contemplará?

CORO:
Cara a cara espero verle,
más allá del cielo azul;
Cara a cara en plena gloria
he de ver a mi Jesús.

Sólo tras oscuro velo,
hoy lo puedo aquí mirar,
Más ya pronto viene el día
que su gloria ha de mostrar.

Cuanto gozo habrá con Cristo 
cuando no haya más dolor,
Cuando cesen los peligros
y ya estemos en su amor

Cara a cara, ¡cuán glorioso
ha de ser así vivir,
Ver el rostro de quien quiso 

nuestras almas redimir.
Soli Deo Gloria